jueves, 28 de febrero de 2013

La UJCE Andalucía ante el 28F: Ni emigración ni resignación ¡Andaluces despertad!

El 28 de febrero de 1980 el pueblo andaluz culminó un largo proceso de lucha en favor de su soberanía con la aprobación del referéndum con el que acceder a la autonomía política para nuestra nación, en igualdad de condiciones que el resto de nacionalidades históricas del Estado. Andalucía accedía a su autonomía por la vía del artículo 151 de la Constitución Española, lo que sobre el papel, garantizaba unas mayores cotas de autogobierno.
Hasta entonces, cada vez que el pueblo andaluz había pedido trabajo, libertad o reclamado su derecho a manifestarse como pueblo, había recibido la opresión como respuesta. El punto cumbre de estas luchas previas en favor de la soberanía andaluza se dio el 4 de diciembre de 1977 cuando casi dos millones de andaluces y andaluzas salieron a la calle reclamando la autonomía para su tierra, en una jornada histórica que desde la UJCE-Andalucía reconocemos como el verdadero Día Nacional de Andalucía.
Sin embargo, los resultados tras más de 30 años de autogobierno han sido insuficientes para una clase obrera andaluza que sigue padeciendo graves problemas socioeconómicos fruto del desarrollo del capitalismo que otorga un papel subalterno a nuestra nación en el conjunto del estado. Además, la actual crisis económica y de régimen que está viviendo el Estado español está provocando intentos de recentralización muy peligrosos para nuestra tierra.
En el contexto de crisis capitalista actual, Andalucía cuenta con una de las tasas de para más altas de toda Europa y la de paro juvenil se sitúa en nuestra tierra por encima del 60 % de los/as jóvenes en edad de trabajar. Las políticas de austeridad impulsadas por la Troika y el Gobierno Central, unidas al escaso margen de actuación del gobierno andaluz en materia de política económica, se traducen en recortes que afectan drásticamente a la juventud andaluza, que es sacrificada para proteger los beneficios de los grandes bancos y los intereses de las instituciones financieras, auténticos culpables de la situación actual y que está haciendo que muchos andaluces y andaluzas vean en la emigración la única posibilidad de lograr aquello que hoy se les niega: un trabajo y un futuro dignos, aunque para ello tengan que abandonar su tierra. En este marco, la entrada de IU en el cogobierno de la Junta de Andalucía no está suponiendo una mejora sustancial de las condiciones de vida de la clase obrera andaluza.
En este 28 de febrero, desde la Juventud Comunista en Andalucía reclamamos el derecho de la juventud andaluza a vivir dignamente en su tierra alejados de los fantasmas del paro, la precariedad o la emigración.
Ni paro, ni recortes (vengan de donde vengan)
¡Viva Andalucía Libre!
Fuente: jcandalucia.org

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